Sabemos que el pan ocupa un lugar especial en la vida de las personas: acompaña desayunos, cenas y momentos compartidos en la mesa con familia y amigos. Por eso, nuestro compromiso es ofrecer un pan que no sólo sea delicioso, sino que también cuide de tu salud y refleje la dedicación y excelencia que ponemos en cada pieza.
¿El secreto de un pan perfecto? La fermentación lenta y la masa madre. Estos dos pilares permiten crear un producto que se distingue por su sabor, textura y beneficios únicos. Hoy queremos compartir contigo cómo conseguimos ese equilibrio entre tradición y calidad que nos caracteriza.
El proceso de fermentación es mucho más que un paso en la elaboración del pan; es el alma misma de cada pieza. En 365, utilizamos fermentaciones de larga duración, que van desde las 24 hasta las 48 horas. Este proceso, además de ser una muestra de respeto hacia la tradición panadera, tiene claros beneficios:
Además, este enfoque artesanal nos permite garantizar un producto fresco y natural, horneado cada día con el cuidado que nos caracteriza.
La masa madre es otro de los ingredientes estrella en nuestra receta. Este fermento natural, que cuidamos y renovamos a diario, no sólo mejora el sabor del pan, sino que también aporta beneficios para la salud:
En 365, nuestra misión es ofrecerte un pan que sea mucho más que un alimento. Trabajamos todos los días para innovar en nuestras recetas sin perder de vista la esencia del horno artesanal, consiguiendo un producto que combina sabor, tradición y bienestar.
Te invitamos a probar el sabor de un pan hecho con fermentación lenta y demasiada madre. Visítanos en cualquiera de los nuestros establecimientos y descubre por qué en 365 hacemos del pan un arte. ¡Tu mesa merece lo mejor!